Las Islas Filipinas en Madrid son evocadas de varias formas en la ciudad, ya que desde el siglo XVI al XIX fueron españolas. Encontramos las huellas de este largo e importante período en determinadas Bibliotecas que son las fuentes inagotables del conocimiento, pero también en monumentos, edificios, museos y en el propio callejero. Vamos a hacer un tranquilo recorrido por algunos de estos lugares.
Las flautas filipinas
Por ejemplo, si tomamos la línea 7 del Metro y nos bajamos en la estación de Islas Filipinas, en la salida a esta Avenida a la altura del número 43 o 48, casi esquina a Guzmán el Bueno
veremos inmediatamente, en el cruce de ambas calles con Cea Bermúdez, este singular monumento constituido por tubos de varios colores que son una evocación de la «flauta suling», instrumento musical de bambú, que suele ser utilizado en las Filipinas y en Indonesia… Estaban diseñadas para sonar cuando soplara el viento…pero al parecer los vecinos cercanos protestaron por sus ruidos nocturnos…y fueron silenciadas…
Monumento a José Rizal
Si superadas «las flautas» seguimos avanzando por la Avenida de las Islas Filipinas, a la altura del nº 34, en el cruce con las calles de Vallehermoso y Santander y junto a la verja del Parque de ese nombre, admiraremos el monumento a José Rizal Mercado, que aquí se alzó en 1996… a los cien años de su muerte.
Fue realizada por el escultor filipino Florante Caedo y la parte arquitectónica es del arquitecto Manuel Rivero Vázquez, jefe de la división de diseño y estética urbana del Ayuntamiento de Madrid. Es similar al que realizó el escultor suizo Richard Kissling (18 (1848-1919) en 1896, para situarla en Bagumbayán (o Luneta) en el corazón de Manila, donde José Rizal – médico, escritor y poeta – fue ejecutado por fusilamiento el 30 de diciembre de 1896, cuando tenía 35 años.
«por orden de un capitán general sin escrúpulos, recién llegado, mal aconsejado y equivocado de medio a medio».
Así calificaba al general español Polavieja, el periodista y escritor Manuel Leguineche (Vizcaya1941-Madrid 2014) en su libro «Yo te diré (La verdadera historia de los últimos de Filipinas)». Leguineche era vecino de la zona, y asistió a la inauguración de este tardío homenaje de desagravio a un pueblo y a un hombre.
A ambos lados del monumento, se reproducen los estremecedores versos de su último adiós, escrito la víspera de su fusilamiento. Están en castellano y su traducción al tagalo: «¡Adiós, patria adorada, región del sol querida,/ perla del mar de Oriente, nuestro perdido edén!/ A darte voy alegre, la triste, mustia vida./ También por ti la diera, la diera por tu bien…».
El Palacio de Cristal del Parque del Retiro
Este Palacio fue obra del arquitecto Ricardo Velázquez Bosco (Burgos 1843-Madrid 1923), y es una original y bella obra de cristal y hierro que se edificó en 1886, en menos de cinco meses, con una estructura prefabricada, realizada por el constructor del hierro Bernardo Asíns, con diseño estructural y cálculos del ingeniero Alberto de Palacio, como lujosa estufa- invernadero para una magna exposición sobre Filipinas que fue todo un acontecimiento en el Madrid de la época.
En este lago se colocaron las embarcaciones con sus aparejos de pesca tal y como se utilizaban en aquellas lejanas tierras que entonces formaban aún parte de la Corona de España y también se alzaron poblados similares a los de los aborígenes.
Museo Antropológico
Cuando terminó la exposición de Filipinas, inaugurada el 30 de junio de 1887 muchas de las piezas mostradas se llevaron al vecino Palacio de Velázquez (obra del mismo arquitecto Ricardo Velázquez Bosco) donde se creó el Museo-Biblioteca de Ultramar, con la idea de celebrar nuevas exposiciones con productos de las colonias ultramarinas. Pero por Real orden de 1908 este Museo fue suprimido… pues ya no había colonias de ultramar.
Asi que todos sus fondos fueron dispersados y trasladados a la Biblioteca Nacional, al Museo de Ciencias Naturales, al Museo Arqueológico y al antiguo Museo del Doctor Velasco sede del actual Museo Nacional de Antropología donde el pasado año 2017 se mostraron una gran parte de estos objetos y una amplia selección de fotografías y documentos relacionados con la citada exposición y que el Museo conserva en sus archivos.
Pero en la sala principal de su exposición permanente pueden verse una selección de los mismos. Y en la que da acceso al Museo las dos canoas originales de aquella ya lejana exposición…
Biblioteca y Archivo del Real Jardín Botánico
En este año 2018 el tradicional calendario editado por el Real Jardín Botánico C.S.I.C. se ha dedicado precisamente a la «Comisión científica de Juan Cuéllar a Filipinas (1786-1795)» reproduciendo en cada mes una de las plantas clasificadas.
Este fondo contiene 80 dibujos botánicos que se produjeron durante la citada Comisión de Juan Cuéllar para la Compañía de Filipinas.
Biblioteca Histórica de la Universidad Complutense
La Biblioteca Histórica de la Universidad Complutense de Madrid cuenta con un importante fondo histórico de tema filipino, a disposición de los investigadores. La colección proviene de los centros que, en 1845, se unieron para formar la Universidad Literaria de Madrid/Universidad Central, pero también de importantes legados y donaciones, como el Legado de Francisco Guerra Pérez-Carral (1916-2011) incorporado a la biblioteca en el 2007.
El catálogo incluye los libros de tema filipino, o editados en Filipinas, publicados entre 1604 y 1898 y está organizado en nueve apartados. De buena parte de las obras anteriores a 1868 se cuenta con copia digitalizada, gracias al proyecto Universidad Complutense-Google Books.
NOTAS.
- La Embajada de Filipinas en Madrid está en la calle Eresma nº2
- Pedro Ortiz Armengol, (Madrid 1922-2009) historiador y embajador durante muchos años en Manila escribió el libro “Casas habitadas y lugares frecuentados por Rizal en Madrid» (1961)