La Plaza de Santa Bárbara (1)

La Plaza de Santa Bárbara conserva la misma configuración con la que nos la mostró Texeira en su famosisimo plano en el año 1665, y tiene una larga y curiosa historia: la nombra Cervantes en una de sus famosas novelas, tuvo un Monasterio dedicado a Santa Bárbara que la dio nombre y por aquí anduvo la Beata Maria Ana co-patrona de Madrid. En sus inmediaciones se levantó la Fábrica de Tapices para la que trabajó Goya y un antiguo saladero de cerdos se convirtió en una terrible cárcel y en una de sus bocacalles murió José Zorrilla.

Plano de Madrid de Texeira de 1656

En el plano de Texeira (1656) vemos que se aprecia sólo un molino fuera de la famosa cerca mandada levantar por Felipe IV y que durante casi 250 años rodeaba y encerraba a Madrid. Aquí se situaba El Portillo de Santa Bárbara, donde terminaba Madrid y empezaba la desolación de la que tantos autores nos hablan…

Y que aún perduraba a principios del XIX, pues seguía esta zona muy abandonada según nos cuenta el famoso cronista de la Villa Ramón de Mesonero Romanos … él llamaba a Madrid «Palmira en el desierto» cómo lo hacían los viajeros franceses o ingleses que venían a Madrid y se asombraban de la desolación que rodeaba la mísera cerca de la capital… El famoso Richard Ford decía en 1830 «Madrid está rodeado de un desierto calcinado, feo, árido, sin vegetación ni color».

Miguel de Cervantes

Miguel de Cervantes situó en esta desolación, en 1613, el campamento de los gitanos de su novela «La Gitanilla»…donde la sin par Preciosa, hechizaba con sus bailes…

«Crióse Preciosa en diversas partes de Castilla, y, a los quince años de su edad, su abuela putativa la volvió a la Corte y a su antiguo rancho, que es adonde ordinariamente le tienen los gitanos, en los campos de Santa Bárbara…»


Los campos de Santa Bárbara con su Portillo eran el punto más alto de Madrid, mientras que la puerta de San Vicente era el más bajo (junto a Príncipe Pio). La de Santa Bárbara fue un acceso situado en la cerca de Madrid, justo en la actual plaza de Alonso Martínez

El Convento de Santa Bárbara y la Beata María Ana de Jesús

El Convento de Santa Bárbara de padres mercedarios descalzos, en el interior de la cerca desde 1606, dio nombre a todo el espacio.

Estaba situado a la altura de lo que hoy es la calle Orellana, fundado por el confesor de la Beata Maria Ana de Jesús (Madrid, 1565- 1624) nacida como María Ana Navarro de Guevara y Romero, y que fue Terciaria de la Orden de la Merced. En la cercana calle de Serrano Anguita fundó su primera Congregación de Mercedarias Descalzas, conocidas luego como Las Góngoras.

Murió María Ana, de una afección pulmonar, a los 59 años en el convento de Santa Bárbara y allí fue enterrada, pero su cuerpo incorrupto fue más tarde trasladado, cuando se derribó el convento, al de Don Juan de Alarcón (en la calle Valverde 15 esquina a la de la Puebla).

El 18 de enero de 1783 fue declarada Beata por el papa Pío VI. Era tal el fervor que la figura de Maria Ana despertaba entre el pueblo, que el Ayuntamiento de Madrid la declaró co-patrona de la ciudad, junto a san Isidro Labrador.​ Su festividad se celebra el día 17 de abril. El 8 de marzo de 2011 se abrió el proceso diocesano de canonización.

Madrid recuerda a la Beata Maria Ana de Jesús

Su imagen, de blanco hábito mercedario y con el Escudo de la Orden, podemos contemplarla en la cripta de la Catedral de la Almudena

Y la iglesia parroquial de la Beata María Ana de Jesús se encuentra en el distrito de Arganzuela de Madrid, cerca de la plaza que lleva su nombre. Fue construida en 1952.​
Dirección: Calle Guillermo de Osma, 10,

La Plaza de la Beata Maria Ana de Jesús también se encuentra en el distrito de Arganzuela, y en ella desembocan las calles de Alicante, Guillermo de Osma, Embajadores y el Paseo de las Delicias.

Igualmente lleva su nombre el Hospital de la Beata Maria Ana, en la calle del Doctor Esquerdo

Busto de San Benito Menni Fundador de las Hermanas Hospitalarias del Sgdo. Corazón de Jesús. 1841-1914

La Real Fábrica de Tapices

En 1720 El monarca Felipe V mandó instalar en sus cercanías – de ahí que se le diera el nombre de Santa Bárbara – la Real Fábrica de Tapices, dirigida por Jacobo Vandergoten y su familia, procedentes de Amberes. Aquí se tejieron los universos de colores creados por la fantasía inagotable de don Francisco de Goya, entre 1775 hasta 1792. Fue una de las más importantes Fábricas de Tapices de la Historia del Arte.

El lugar elegido era «Fuera de la Puerta de Santa Bárbara» donde estaba ese molino que vemos en el plano de Texeira y que se conocía como el campo del tío Mereje (entre las actuales calles de Santa Engracia y Sagasta).

Pero en 1882 el edificio fue derribado y la Real Fábrica trasladó su actividad al Olivar de Atocha, hoy calle Fuenterrabía. Su espacio fue más tarde ocupado por un singular edificio construido en 1900 por el arquitecto Luis de Landecho.

Edificio de 1900 en la Plaza a Alonso Martínez

ES decir, se alza sobre el solar del antiguo molino y de la Fábrica de Tapices y se diseñó como síntesis de todos los estilos arquitectónicos del «fin de siglo», con torreones que nos recuerdan la Edad Media, y con una original cúpula octogonal, con forma de sombrero, coronando el torreón de la esquina,

Plano de la zona. A la calle JOaquin García Morato se la devolvió su nombre anterior de Santa Engracia en 1980.

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