El Cerro de San Juan del Viso (en la Alcarria madrileña) sobre el que tantas veces he visto ponerse el sol y del que, a mitad del s. XVIII, el padre Enrique Flórez ya nos dejó dicho que:
A este fin fue Compluto (Alcala de Henares) fundada en un alto de la Cuesta que, desde el tiempo de los moros se llama de Zulema, donde hay una gran posesión de los Padres Trinitarios descalzos de Alcalá, cuyo término se llama San Juan del Viso distante de la ciudad una legua, aunque menos si se pudiera ir por línea recta, pero ímpidelo el río que pasa entre los dos sitios, sin puente por aquella parte. La configuración de la Cuesta es como una gran Mesa elevada sobre el campo de Alcalá (…) Es uno de los Balcones más deleytables que he visto, registrándose desde allí muchas leguas de tierra…(*)
Yo lo contemplo desde el pueblo de Villalbilla, mientras el sol dora la piedra de la iglesia de Nuestra Señora de la Asunción que tengo justo a mis espaldas.
Villalbilla es uno de los tres términos municipales, junto a Alcalá y Torres de la Alameda, entre los que está repartida la superficie del gran Cerro de San Juan del Viso, cuya altitud máxima es de 784 metros. Desde su extensa meseta divisamos perfectamente las sierras de Guadarrama y la de Ayllón (Guadalajara), y se destacan (a la izquierda de la fotografia) las siluetas de las cuatro torres que se han convertido en uno de los iconos de Madrid.
También Miguel Unamuno (1864, Bilbao, 31 de diciembre de 1936, Salamanca) escribió sobre este entorno tan especial y decía así:
Rodean su campo, al de Alcalá, como ancho anfiteatro los barrancos de la sierra, en que se alzan pelados el cerro del Viso, el del Malvecino, la meseta del Ecce Homo. Lame los pies de los cerros, separando la Campiña de la Alcarria, el Henares de frondosas riberas festoneadas de álamos negor y álamos blancos. A un lado el Henares, la sierra y la Campiña al otro (…) (**)
Subiendo de Alcalá de Henares, por los barrancos, y superado el río Henares, se llega al Alto o Cerro del Gurugú (Villalbilla) con el Cerrro del Ecce Homo, también llamado de la Vera Cruz, al Este (dentro del denominado Parque de los Cerros) y San Juan del Viso o de Zulema al Oeste .
En el del Ecce Homo, muy visible desde variados lugares de la zona, es donde se alzó la Fortaleza árabe, de la que aún quedan algunos restos y que fue atacada por los cristianos desde el puntiagudo cerro que vemos a su izquierda,… por eso llamado de Malvecino…
Y caminando hacia el Ecce Homo, un cerro con su historia y su leyenda, podemos ver perfectamente los restos árabes de la fortaleza alzada en el siglo IX. También es conocida como «Alcalá la Vieja», por el estado de abandono en que quedó tras su caída a finales del s. XII.
La Alcarria
En el famoso diccionario de Madoz, se dice que «Alcarria» es palabra de origen árabe y que significa alquería, y que limita al Norte con Jadraque, Cogolludo y Sigüenza, por el Este con tierra de Molina (todas en Guadalajara) y principios del reino de Aragón; por el Sur con tierras de Cuenca y la Mancha y por el Oeste con la campiña de Alcalá de Henares. También explica que el terreno comprendido en esta circunferencia es áspero, pues presenta multitud de cerros, siendo en algunas partes tan elevados que causan admiración al viajero…(***)
Otro personaje enamorado de la Naturaleza, experto en Ciencias Naturales y volcado en la pedagogía, fue Carlos Vidal Box (1906-1970) que dedicó una parte de su «Guía de recursos pedagógicos en Madrid y sus alrededores» a describir ampliamente esta zona (Madrid, CSIC, 1976, p.247-272), diciendo entre otras cosas»
(…) Un paisaje extraño y cincelado por las aguas salvajes del Henares se extiende desde el Cerro de San Juan del VIso hasta el Ecce Homo.
Alcarria es pues una tierra alta, meseta o páramo raso, abarrancado, con espectaculares barrancos…es lo mismo que paramera, meseta o viso (de ahí el nombre del Cerro del Viso).
La Alcarria madrileña
Y una buena parte de la Alcarria madrileña se integra en la antigua tierra de Alcalá, siendo su elemento definidor el río Henares, que la atraviesa desde el Noroeste al Suroeste y la divide en dos subcomarcas naturales bien definidas y diferenciadas: la baja y llana a su parte derecha, denominada La Campiña (donde se asienta Alcalá), y la alta con erosiones y barrancos en la margen izquierda, donde está situado el pueblo de Villalbilla, como puerta y acceso a esta comarca.
El Cerro de San Juan del Viso
En este majestuoso «cerro-testigo» de laderas arcillosas y perfil trapezoidal, de 785 metros de altitud y a unos 200 metros sobre el nivel del rio Henares, se han encontrado restos de los primeros asentamientos humanos en el término, pertenecientes al Neolítico, entre 8000 y 3000 años a.d.C. En torno al siglo V a.d.C. se asentaron en la zona los carpetanos, un pueblo celtibérico que tuvo un Castro en la planicie del Cerro. Los romanos los conquistaron y sobre los restos de este poblado asentaron la primera sede de Complutum entre los años 182 y 179 a.d.C.
Con la llegada de los árabes a España el Cerro de San Juan del Viso pasó a conocerse, como decía el padre Flórez, como monte de Suleimán o de Zulema, principalmente por la leyenda de la fabulosa Mesa de Salomón encerrada en una de sus cuevas, así no es de extrañar que el propio Cervantes se hiciera eco de ella en la primera parte de El Quijote:
“Y aún haré cuenta que voy caballero sobre el caballo Pegaso, o sobre la cebra o alfana en que cabalgaba aquel famoso moro Muzaraque, que aún hasta ahora yace encantado en la gran cuesta Zulema que dista poco de la gran Compluto”. (Capítulo 29: Que trata del gracioso artificio y orden que se tuvo en sacar a nuestro enamorado caballero de la asperísima penitencia en que se había puesto).
Y llegamos a este Cerro desde Vllalbilla, por la carretera que va a Loeches desde el Gurugú, superada la urbanización Peñas Albas una estrecha carretera a la derecha nos conduce a su dilatada cima, ocupada en un extremo por unas instalaciones militares, repetidores de televisión y telefonía. La ladera que mira hacia Alcalá fue repoblada con especies arbóreas que ha favorecido la fijación del suelo y protegido de una mayor erosión.
Desde lo alto del Cerro de San Juan del Viso
A la derecha, tras los árboles vemos las siluetas de los Cerros del Ecce Homo y del Malvecino
Una de las últimas veces que he subido pude verificar que, desgracidamente, algunas personas no suben a contemplar el paisaje sino a ensuciar tanta belleza y a estropear, sin ningún sentido, lo que puede servir de información y conocimiento a todos…
Lo cierto es que con sol o con lluvia, al amanecer o al ocaso, siempre impresiona la serena y limpia silueta de este tan característico cerro- testigo
que encierra tanta historia y tanta riqueza arqueológica y paleontológica
El Cerro del Viso en el Arte
Por eso agradecí tanto a mi buena amiga Mercedes de Artede Madrid que me avisara de una exposición, en la Casa de Vacas del Retiro, donde había un gran lienzo a él dedicado.
Así que el último día de la exposición, el pasado 29 de mayo, acudí a contemplarlo y disfrutarlo… Su autor es el pintor Alberto Martín Giraldo y él mismo nos cuenta como y por qué lo hizo…
Nada menos que en compañia del gran Antonio López, a quien retrató el pasado año en la cima del Cerro
Un video nos contaba la historia y elaboración del cuadro
Ha sido una buena noticia para todos los admiradores de este lugar tan singular.
NOTAS
(*) Enrique Flórez «España Sagrada». Madrid 1751. T. VII p.162-163. Son 52 volúmenes. Existe un índice de la obra hecho por Ángel Gonález Palencia, del AHN, patrocinado por The Hispanic Society of América. Madrid 1918.
(**)Miguel de Unamuno: «En Alcalá de Henares», en rev. El noticiero bilbaino (18 nov. 1889). Recogida en «De mi país». Madrid: Espasa Calpe. 1943 (1ª ed.) pp 62-77.
(***) Pascual MADOZ: «Diccionario Geográfico-Estadístico-Histórico de España y de sus posesiones de Ultramar» Madrid 1848. Ed.facs.: «Madrid. Audiencia, provincia, intendencia, vicaría, partido y villa». Madrid: Giner, 1981. p. 433
… se nota que es un texto desde el corazón. Al igual que las fotografías elegidas.
Es un paisaje que me trae recuerdos de infancia, igual que los lugares que nombras.
Y, no me digas por qué… pero qué bonito suena… la Alcarria madrileña…
Besos
Hildy
Tiene magia el lugar, me alegra que lo hayas captado. Y sí, es bonito el nombre de alcarria… recuerda que alcarria es páramo y a mí lo del parámo me suena siempre a «Cumbres borrascosas»…¡siempre salen los libros!…Muchas gracias por tu bonito comentario
Muchas gracias María Rosa, un post precioso con unas fotos espectaculares.
¡besos!
Gracias a tí Mercedes…ya sabes que yo tengo toda esta zona en el corazón…
Rutas tranquilas y llenas de vistas increíbles, tenemos pendiente hacer esa ruta la semana que viene. Te apuntas?
Pues me encantaría. Decirme día y hora.
Felicidades por el artículo. Es maravilloso y se agradecen esas palabras sobre Alcalá y su Tierra desde Madrid . Sin embargo, nosotros, desde hace más de 900 años decimos Alcarria de Alcalá De hecho desde 2005 iniciamos una lucha porque se divulgara el nombre Alcarria de Alcalá, porque es la que se extiende por el territorio histórico de Alcalá. Hemos conseguido que muchos ayuntamientos instituciones y particulares recuperen el nombre e incluso la Consejería de Turismo. Sí les rogariamos encarecidamente que, si bien la comarca está en la Comunidad de Madrid, la Alcarria a la que se refiere el artículo es la Alcarria de Alcalá al sur de la Campiña del Henares que queda al norte del Henares . Un fuerte abrazo
MUchas gracias por su comentario Manuel. Soy una entusiasta admiradora de Alcalá de Henares, Tanto en este blog como en el de «viajando tranquilamente por España» he escrito muchísimas veces sobre su arte, su historia, su cultura, sus bellezas un poco escondidas a veces… Pero sinceramente ignoraba (no vivo en Alcalá) el término de «La Alcarria de Alcalá», y desde luego cuando la denomino «Alcarria madrileña» no la vinculo a la capital si no a la Comunidad de Madrid (mi blog es de Madrid y su Comunidad). Pero tomo buena nota y agradezco su observación. Un afectuoso saludo
De nada. La verdad es que el trabajo ha sido duro porque Alcalá merecía seguir dando nombre a su Alcarria como Guadarrama da nombre a su sierra o Molina da nombre a su Señorío. Una quincena de ayuntamientos entendió el argumento y crearon el GRUPO DE ACCIÓN LOCAL ALCARRIA DE ALCALÁ. De ahí vino la feria agroalimentaria Alcarria de Alcalá que también promueve la Comunidad de Madrid. Para nuestra sorpresa, la Consejería de Turismo ya utiliza nuestra propuesta en sus publicaciones. Varias páginas web de ayuntamientos han pedido el complejo y hablan de que su municipio está en la Alcarria de Alcalá. Merece la pena promover y cuidar este patrimonio toponimico de la Comunidad de Madrid.
Recibe un afectuoso saludo y ya sabes que en Alcalá, ciudad, Campiña y Alcarria tienes tu otra tierra, seas de donde seas.
Mágnifico artículo. Vivo en las cercanías y no tiene perdón no haberlo visitado aún