Un hombre solo construye una catedral
El pasado mes de Octubre conocí a Felix Yañez un artista que ha esculpido todo un pueblo medieval en Quintanilla del Agua. Él nos contó que cuando le habían hablado de otro artista, tan loco como él, que estaba construyendo una catedral en Mejorada del Campo viajó hasta allí para conocerle… y nos decía que aún no había salido de su asombro.
Y es que nadie puede salir del asombro y la sorpresa cuando te vas acercando a Mejorada del Campo (desvío en el Km. 23 de la N-II, Alcala de Henares-Loeches, para tomar en la próxima rotonda el de Mejorada) y descubres como unas cúpulas inacabadas sobresalen del resto de edificios. Una vez en el pueblo, hay que dirigirse hacia el polideportivo y enseguida nos situaremos frente al armazón de una catedral en fase de construcción avanzada.
Su constructor es Justo Gallego Martinez, que nació en 1925 en Mejorada del Campo y que después de ingresar con 27 años en el Monasterio de Santa María de Huerta, hubo de abandonarlo sin llegar a hacer los votos, cuando enfermó de tuberculosis en 1961.
Él prometió que si se curaba alzaría un templo en agradecimiento a Dios y a la Virgen, y así lo está haciendo desde hace unos 50 años. Su fe no se planteó mover montañas, sino construir una catedral, y con férrea voluntad se puso a trabajar sobre los terrenos heredados de sus padres, sin desfallecer ni un solo día. Y así sigue a sus 94 años.
Los constructores de catedrales
En el catálogo de una magna exposición, celebrada en León en 1993, sobre los constructores de catedrales del Camino de Santiago, puede leerse: «Toda construcción es un acto de fe (…) La edificación de un templo es un doble hecho, espiritual y estético con profundas raíces culturales y económicas».
En aquellos lejanos siglos (del XI al XIII) el responsable de la construcción de una catedral, era el Maestro de Obras, que con su regla, plomada y compás, concibe, planifica y dirige la construcción con una mente lúcida y un saber artesanal completo. Con este bagaje, elaboraba un proyecto, basándose en ejemplos tomados de otros edificios y siguiendo, probablemente, la secuencia de ensayo, error, corrección y acierto, mientras dirigía un equipo de trabajadores manuales, cada uno con un oficio o especialidad.
Pero ahora nos encontramos frente a una catedral concebida y construída por un solo hombre, sin ningún tipo de licencia, con materiales de derribo y otros reciclados, con materiales desechados por las constructoras y por una fábrica de ladrillos cercana, con una paciencia infinita, un ingenio avivado por la necesidad, y una fe sin fisuras, que ha llegado a un punto tan sorprendente que HAY QUE VERLO PARA CREERLO.
Justo tiene en su corazón y en su cabeza una catedral magnífica, que evoca nada menos que la de Santa Sofía en Constantinopla, y su entusiasmo ha contagiado a jóvenes voluntarios que en algunas temporadas le ayudan.
Su obra le llevó a protagonizar en 2005 un anuncio publicitario de televisión para la marca de bebida Aquarius y eso tuvo una gran repercusión durante una temporada… Pero el gran problema es que la magna obra no cuenta con licencias para su edificación, ni está avalada por ningún Arquitecto y por tanto no tiene ningún futuro viable… Y uno se pregunta ¿Cómo se ha podido dejar durante tantos años seguir adelante con esta obra? ¿Cual es su futuro? ¿Qeé va a suceder cuando Justo no esté? ¿Será derribada?
He visitado la catedral varias veces desde finales de los 90 e incluso he hablado con Justo Gallego en varias ocasiones en las que nos acompañó a conocer algunos de sus espacios favoritos… como la gran cripta donde al parecer quiere ser enterrado…
El otro día he regresado. Esta vez era en un dia muy triste y nublado. Todo me ha causado una gran pena… Esta obra es verdaderamente la historia del tesón y del ingenio de un hombre y eso la hace tan valiosa… pero casi sin duda está destinada a desaparecer con él…