La Noche de Reyes fue para mi, durante muchos años, una Noche absolutamente mágica…Cuando yo era niña no había Papa Noél, eran sólo los Reyes los que llegaban a cada casa en la noche del 5 de enero…Había que acostarse pronto, y dormirse enseguida… dejar agua para los camellos y turrón y polvorones y una copita de anís para los tres Reyes… A la mañana siguiente, junto a los juguetes, el cubo del agua vacío y los dulces consumidos daban fe de su presencia. Seguir leyendo La Noche de Reyes