La Biblioteca Musical en el Conde-Duque ha sido la última visita guiada de la que he podido disfrutar el pasado 21 de febrero, con la Fundación Amigos de la BN y guardo de ella un gran recuerdo. La Biblioteca Musical cumplía «100 años dedicados todos ellos a la difusión de la música en la ciudad de Madrid».
Aunque he ido al Conde Duque a varias exposiciones, siempre muy interesantes, nunca había estado en esta Biblioteca Musical e ignoraba incluso su existencia.
La visita guiada fue una delicia, pues la guia (de la que siento no recordar su nombre) transmitía entusiasmo por la labor que allí se desarrolla.
Nos explicó los servicios que desde hace 100 años viene ofreciendo la Biblioteca Musical, entre otros el préstamo y consulta de partituras y materiales audiovisuales y también de instrumentos, la utilización de cabinas y otras variadas actividades, como conferencias,talleres, conciertos etc.
Y nos descubrió (o al menos a mí) la existencia de un personaje clave para esta Biblioteca Musical, que fue Victor Espinós Moltó (1871-1948) que empezó trabajando en la Biblioteca Circulante Literaria en1918 y enseguida tuvo la gran idea de hacer también una Biblioteca Circulante Musical, y presentado el proyecto al Ayuntamiento fue aprobado con muy positivos resultados.
Años más tarde se aprobó otro proyecto, pionero en España y en Europa: el servicio de préstamo de instrumentos musicales a domicilio.
Y por último pudimos contemplar admiradamente la colección de instrumentos musicales que inició Victor Espinós con las mejores piezas que habían llegado por diversos caminos a la Biblioteca Musical… como una preciosa arpa, un piano de mesa de palo santo, también flautas japonesas y una guitarra donada en 1932 por el gran Andrés Segovia…Una visita inolvidable, de las que te hacen feliz.
Esta exposición preparada y explicada con tanto amor estaba programada hasta el 12 de abril… Espero y deseo que cuando toda esta pesadilla termine, podamos volver para volver a disfrutar con ella.
