La palabra «perspectiva» se puede referir a una expectativa o esperanza en la vida, pero también a un panorama, a una visión de lejanía o desde un lugar insospechado . Y aquí vamos a buscar esas visiones o panoramas que podemos descubrir paseando por Madrid, y en los que a veces no nos hemos fijado.

Por ejemplo, si desde la calle de Alcalá tomamos la calle del Barquillo y llegamos a la amplia Plaza del Rey y nos situamos donde la Casa de las 7 Chimeneas, actualmente Ministerio de Cultura (que hemos visto en la serie de «La Fortuna», tan interesante y bien dirigida por Alejandro Amenabar),

descubriremos una perspectiva muy curiosa… A la derecha de la fotografía la magnífica cúpula del edificio «Metrópolis» que estuvo coronada por el Ave Fénix simbolo de la empresa propietaria (La Unión y el Fénix) hasta que, en la década de los 70, la compañía vendió el edificio a sus dueños actuales, la aseguradora Metrópolis. Los antiguos propietarios decidieron llevarse la estatua (por entonces elemento familiar del paisaje madrileño) a su edificio en el paseo de la Castellana y la estatua fue reemplazada por otra que representa la Victoria alada, obra de Federico Coullaut-Valera,

Si giramos la vista levemente a la izquierda, veremos la gran escultura de la Diosa Minerva que corona el edificio del Círculo de Bellas Artes.

David Roberts y su perspectiva de la calle Alcalá

Y aquí vemos una magnífica perspectiva de la calle de Alcalá desde la Plaza de Cibeles, debida al romántico pintor de origen escocés David Roberts (Edimburgo 1796- Londres 1864) muy conocido por sus acuarelas y grabados.

David Roberts recorrió España entre 1832 y 1833. Reflejó nuestro país en decenas de paisajes que se popularizaron en toda Europa, gracias a que fueron reproducidos a gran escala por medio de grabados y publicados en varios libros de ilustraciones.

Concretamente estuvo en Madrid desde el 16 de diciembre de 1832 al 9 de enero de 1833 y podemos reconocer perfectamente en su obra la soberbia cúpula de la iglesia y convento de las monjas Calatravas, que habían sido construídos entre 1670 y 1678 por el arquitecto y fraile agustino Fray Lorenzo de San Nicolás .